Cuando se haya talado el último árbol, envenenado el último río y pescado el último pez, entonces comprenderás que el dinero no se come.

miércoles, noviembre 29, 2006

Yo soy un hombre

Lunes. 16.15. Horario de tutoría. Dos limpiadores pulen el suelo del pasillo. Corrijo exámenes y, por un momento, presto atención a la conversación de los dos hombres (uno de ellos de unos 30 años y el otro de unos 40).

¿De qué hablan? Venga, apostad. ¿Pensáis lo mismo que cualquiera? ¿Sexo? ¿Fútbol? ¿Mujeres? ¿Política?

Pues no. Abajo los estereotipos. Hablaban de todo lo que se puede encontrar en la Red, de guitarras eléctricas Fender y de Jimi Hendrix. Un "ole" por ellos :)

Ya no quedan dudas de que las apariencias engañan: los hombres piensan, sienten, tienen mundo interior... y yo soy feliz por ello. Pero los publicistas no parecen pensar lo mismo y han tenido la feliz idea de promocionar hamburguesas de una conocida multinacional norteamericana con la hombría de algunos como bandera.

Soy un hombre, rugiré.
Estás muy ciego si no lo ves,
y me muero de hambre para pasto de animal. (??)
Juer, mis tripas suenan fatal;
ahora mismo iré a buscar un doble whopper;
hombre, está genial,oh, sí, con pan.
He probado canapés (...)
la soja voy a dejar,
ese doble whooper me hace feliz;
es todo para mí.
Me hincharé a comer como nadie,
estoy hambriento,
no voy a cambiar.
Voy tragar esta hamburguesa doble carne, no soy un pringao.
Estoy hambriento, no voy a cambiar: soy un hombre.

El slogan final es: "Come como un hombre, hombre."

Como nota curiosa, si miráis bien, en el anuncio español despliegan una pancarta que dice "Todo es para mí", mientras que en el americano se lee "Eat this meat" (cómete esta carne). ¿Por qué?

El anuncio es una joya: por un lado, nos pintan a los hombres como unos tragones, carnívoros, insaciables y, además, egoístas, incultos testarudos e inmutables. O_o Tanto hablar de coeducación, de luchar contra el sexismo, y acaban poniéndonos en bandeja un modelo cavernícola del nuevo hombre del siglo XXI. ¿Para eso tanto esfuerzo?
Además, se tilda de "pringaos" a aquellos que no son capaces de engullir dos cachos de carne hipercalórica y grasienta. Y claro, la frase del final anima a los machos ibéricos a comerse eso. Si no, podrían pensar que no son lo suficientemente hombres. Vaya. Como mujer no me doy por aludida, pero me toca las narices mucho que utilicen un estereotipo tan trillado como ese. ¿Qué tiene que ver lo que se coma con ser "un hombre" o no? ¿¿Qué es lo que te hace ser más o menos hombre que otro??

Y como pintan a los hombres de garrulos e incultos, pues mejor dejar la soja y pasarse a la carne. Después de haber sacado tropecientos mil estudios sobre lo perjudicial que es comer carne en exceso y los beneficios de la soja, venga, animemos al personal a tragar hamburguesas.
Los gobiernos occidentales intentan frenar la obesidad y nos ponen en bandeja, no una hamburguesa normal, sino una doble: más grande y doble de carne...y calorías.

Por supuesto, la verdura es pasto de animal...Pero los señores publicistas olvidan que somos animales también, y no exclusivamente carnívoros.

Para los que quieran el anuncio: castellano inglés

En el siguiente post, más sobre BK.

Besos

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