Cuando se haya talado el último árbol, envenenado el último río y pescado el último pez, entonces comprenderás que el dinero no se come.

domingo, julio 06, 2008

Supercook Summer '08 (Brécol I)

Sí señor, el delantal surte efecto...Y qué mejor manera de continuar el "modo cocinillas" que con el gran olvidado de mi dieta...El brécol.

Para más información sobre el amigo brécol, podemos consultar, por ejemplo:

http://www.enbuenasmanos.com/articulos/muestra.asp?art=1512

http://verduras.consumer.es/documentos/hortalizas/brecol/intro.php

La recetilla de hoy es...


Timbales de brécol con salsa beurre blanc

Ingredientes:

1cda de mantequilla

350gr de brécol

45ml de creme fraiche o nata líquida

1huevo y una yema

1cda de cebolletas picadas

Sal, nuez moscada, pimienta negra

Salsa de mantequilla y vino blanco** (salsa beurre blanc)

Preparación:

Precalentar el horno a 190ºC. Engrasar 3 moldes para los timbales y poner en la base papel de hornear. Cocer el brécol al vapor durante 8-10 minutos hasta que esté blando, pero verde.

Poner el brécol en la procesadora/trituradora/picadora/batidora junto con la nata y los huevos hasta que quede suave. Añadir las cebolletas, salpimentar, echarle nuez moscada y volver a mezclar.

Poner la mezcla en los moldes y meter en una fuente de horno al baño maría, con el agua hasta un poco más de la mitad de los moldes. Hornear unos 25 minutos. Desmoldar, quitar el papel y acompañar con salsa de mantequilla y vino blanco.

**Para la salsa necesitamos:

- 60 ml vino blanco
- 60 ml vinagre de vino blanco
- 2 cebolletas pequeñas
- 125 g mantequilla
- 1 chorrito de nata líquida

Poner en un cazo las cebolletas picadas junto con el vino y el vinagre y reducir a un 90%. Añadir la nata y mezclar bien y luego ir echando progresivamente la mantequilla en cubos. Ligar la salsa bien, salpimentar y colar si es necesario.


Consejos: Preparar la salsa mientras se hacen los timbales en el horno.
Los ingredientes dan para 3 timbalitos, así que, u os los coméis entre dos junto con un postre apañado o duplicáis los ingredientes y hacéis más cantidad, porque para la que hay que liar...mejor que salga de sobra.

Fotillos:

Los timbales recién sacados del horno y en la fuente, al baño María



Una vez desmoldados...



Uno de ellos emplatado y con la salsa por encima


Perdón por las cutre-fotos, pero es que daba poca luz en la cocina, no tenía espacio para poner los platos en otro lado y...tampoco soy muy buena.

Más cositas...

Lo de que hagáis más cantidad, os lo recomiendo. De verdad. Aparte de ser un poco por mi forma de ser, parece que en la cocina se ha vivido una batalla campal. Menos mal que la lucha entre las cebolletas, el brécol y la mantequilla da como resultado algo rico :P

La presentación os la podéis currar más si queréis. En el libro se sugería adornar con cebollinos cortados finitos y un par de ramilletes pequeñitos de brécol, pero creo que si el plato es de un color que contraste con el verde, la salsa y una hojita de perejil, queda bastante bien. A mí no me daba tiempo a presentarlo mejor :-s (Me metí en la cocina un pelín tarde).

Lo de la salsa...Yo la he colado y ha quedado genial. Si os gustan los trocitos de cebolleta, no hace falta colarla. La metedura de pata ha sido prepararla antes de meter en el horno los timbales. Como tiene mucha mantequilla, para que no se solidificara, la he dejado al mínimo en un cazo al baño María y así estaba calentita para cuando hubiera que echársela a los timbales. No sé si se puede conservar en el frigo, pero me da que es mejor consumirla en el momento, igual que los timbales (opinión personal, ¿eh?).

Sobre el tiempo empleado...Ejem. No lo sé. Yo me he metido ahí dentro, he puesto la musiquilla y a eso de las 3 he asomado la cabeza por la puerta :-s

Creo que básicamente, eso es todo. Si se me ocurre algo más que añadir, os lo cuento.

PD: ¡Que sí, que está bueno! Y os lo dice una a la que no le gustan las verduras :))

Eso es todo por hoy desde mi delantal tomatero.

Besitos

PD2: Si os fijáis, la salsa parece que no está lo bastante ligada. Eso es por lo que os he dicho de que la tuve que dejar al baño María mientras se hacían los timbales. Si la hacéis en el momento, queda muy bien y no se separa nada.

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